La obra se tuvo que paralizar a
principios de junio, al aparecer una estructura de silleria, durante la
excavación del foso del ascensor.
Los estudios realizados por la empresa
ondense de arqueología A.R.Q. y remitidos a la conselleria de Cultura confirman
que son de poca importancia los restos aparecidos en el edificio. De hecho son
antiguas estructuras relacionadas con el almacenamiento de diezmos y primicias
de la Iglesia y la Orden de Montesa. La existencia de un suelo impermeable con
un hoyo en forma de media esfera indica que se trata de balsas para la
conservación de líquidos, probablemente aceite.Dada la poca importancia del mismo, la conselleria de Cultura ha dado permiso para poder seguir con las obras. El proyecto contempla una nueva escalera de acceso a las dos plantas del edificio y la instalación de un ascensor hidráulico, lo que permitirá una accesibilidad total al mismo.
La obra que cuenta con un presupuesto de adjudicación de 43,700 euros.
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