Los populares consideran la imputación de Enrique Navarro como el final de una época en el ayuntamiento

La nueva situación legal del alcalde de Onda agudiza el descontrol con que gobierna el tripartito

La imputación del alcalde de Onda, Enrique Navarro, por presunta prevaricación, y, también de su mano derecha, el teniente alcalde de urbanismo, Juan Miguel Salvador, es un síntoma más de que Navarro está cerca de cerrar una época en el ayuntamiento de la ciudad.
“Se aferró al cargo ofreciendo unos sueldos desproporcionados al BLOC y a AMI, tal y como denuncia la Federación Valenciana de Municipios y Provincias, ignora el informe que él mismo pidió a dicha institución para no tener que bajarse el suelo todo lo que le recomiendan, incrementa en 90.000 euros un servicio que sacó a concurso hace sólo seis meses, aumenta considerablemente el gasto en publicidad, pese a la austeridad presupuestaria del resto de municipios, tiene al ayuntamiento con una deuda de diez millones de euros y siguie pidiendo más préstamos para el día a día de la actividad municipal, tiene que subir el precio de las multas para poder financiar su endeudamiento, dobla el presupuesto para partidas, como la del mantenimiento de las obras públicas, retrasaa obras de la Generalitat porque las considera una amenaza electoral, adjudica a dedo a gente afín, como en el caso del Casal Jove, otorgado a una persona que fue en las listas del PSOE en Les Coves de Vinromá, se muestra servil a sus jefes de Madrid, como en el tema del azulejo, para asegurarse un puesto en el partido por si deja de ser alcalde, etc…”, ha denunciado hoy el edil popular Vicente Ramón.
Enrique Navarro y Juan Miguel Salvador declararon el pasado martes en el juzgado de Nules como imputados por presunta prevaricación.